Presentación Revista Ciencias y Humanidades No. 9

Autor
Dra. María Elena Álvarez-Buylla Roces

Cargo
Directora General del Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías

Fecha

1 de marzo de 2024

Es otro día de celebración para las comunidades de Humanidades, Ciencias y Tecnologías de este bellísimo y gran país que tanto queremos. Estamos para informar al pueblo de México y a toda la comunidad que tenemos recién salido de la imprenta el número 9 de la transformada revista Ciencias y Humanidades. Este día tenemos un número dedicado a un tema fundamental: la memoria histórica, por ello agradezco a quienes nos acompañan aquí presencialmente y por supuesto a todas las personas que se han conectado vía remota para escuchar esta información.

Saludo con gusto a quien ha coordinado este noveno número de esta publicación gratuita, trimestral que ha iniciado este Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías, me refiero al doctor Felipe Ávila, director del Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones Mexicanas, a quien la tarea que nunca es fácil de coordinar este número, por supuesto sin la participación de todas y todos los que entusiastamente nos enviaron sus contribuciones.

A Gaby Pulido, quien también nos ayudó a coordinar una parte de este número y a varias otras personas autores.

De igual modo, saludo, abrazo con cariño, afecto, respeto y siempre admiración al doctor Alejandro de Ávila Blomberg, quien ha dedicado su vida a construir este espacio de paz de conocimiento biocultural ejemplar, que sirve de inspiración para el fortalecimiento, la formación de la red de Jardines Etnobiológicos del Conahcyt y desde hace muchos años, está a cargo del jardín etnobotánico de Oaxaca que a esa hora uno de los jardines de la red de Jardines Etnobiológicos. Tiene una formación muy sólida y conocimiento en aspectos de la memoria de nuestras raíces tan importantes que tenemos en este país, tan profundas que nos dan sentido pertenencia cultural y también perspectiva y porvenir; es muy importante tener aquí en representación de muchísimas voces no solamente académicas formalmente, sino de grandes sabidurías que siguen dándole fortaleza a nuestro querido México.

También saludo con enorme reconocimiento a la doctora Ana Lau Jayven, quien es una profesora muy distinguida de la Universidad Autónoma Metropolitana en Xochimilco, una unidad que además ha sido pionera en marcar diferentes formas de ejercer la docencia, la investigación y con ello la incidencia hacia la sociedad.

Saludo con mucho reconocimiento, cariño, gratitud a todas y a todos los autores, a quienes nos acompañan aquí y a quienes no pudieron venir, pero que estamos seguros, seguras que están contentas y contentos con haber sido parte de este esfuerzo colectivo, de este número tan bello y que, además, por el gran trabajo de las y los artistas que acompañan la narrativa escrita con una narrativa visual que no necesita palabras para reconocerse, para admirarse.

Armando Fonseca fue el creador de la portada y Santiago Moyao de la gran mayoría de las ilustraciones que en sí mismas fortalecen y profundizan la narrativa de esta revista de Ciencias y Humanidades, y en particular de este número, pero también a nuestras otras compañeras compañeros que suman siempre todo su talento, su empeño, su cariño para poder hacer realidad un proyecto editorial tan retador como es esta revista.

A partir de 2018, México vive una transformación profunda que, además de ser un momento histórico en sí mismo, es también el resultado de múltiples luchas y resistencias que a lo largo de la historia construyeron una visión común que se materializó más tarde en un movimiento de ideas universales, fraternas y solidarias, que de forma progresiva avanzaron hacia lo que hoy conocemos como el nuevo humanismo mexicano.

Este modelo conceptual que aterrizó desde luego el presidente, licenciado Andrés Manuel López Obrador, en sí mismo un historiador versadísimo que nos da cátedra día con día, suma la experiencia social, política, histórica de distintas luchas fragmentadas para que la nación alcance las libertades, la democracia y una prosperidad colectiva opuestas a la tiranía del abuso del poder que se vio en el pasado, como se ha documentado de manera muy seria por académicos y académicas que se dedican al estudio de la memoria histórica, a que no se nos olvide, a no propiciar la amnesia colectiva.

Tuvieron como simiente una gran diversidad de luchas vigorosas, que se manifestaron desde diversas identidades condiciones y latitudes de México e incluso del resto del mundo, es por ello que hoy nos redirigimos hacia el gran desafío de distinguir con criterio llano y dimensión social aquellas gestas que con dolo y predominancia fueron invisibilizadas e incluso silenciadas en la historia neoliberal; es decir, en la versión de la historia neoliberal con la imposición de narrativas hegemónicas y además personalistas, un sello muy característico de ese quehacer que estamos queriendo desenraizar, para pasar a un quehacer más colectivo, más sustantivo, más significativo, desde el punto de vista social.

Es así como este nuevo replanteamiento y orden al conglomerado histórico que se va a develando en este momento de la historia misma, nos permite reconocernos como una nación con vasta riqueza cultural y un grandioso pasado milenario que abrazamos como nuestro mejor legado de la historia política nacional.

En este contexto, e un honor poder presentarles desde esta representación honrosísima y que llevo con toda y sincera humildad este nuevo número de la revista Ciencias y Humanidades, en el cual hemos incorporado un recorrido por historias breves y sustantivas que nos permiten conocer el rastro de las improntas del paso de hombres y mujeres que lucharon por la dignidad, la libertad y la justicia.

Es un eco de las voces que décadas y siglos atrás fueron calladas y oprimidas, pero que ahora resuenan con la investigación y reconstrucción de memorias para encontrar la verdad, su verdad y es solamente una pequeña muestra de todo lo que nos hubiera gustado incorporar. Es así como la investigación histórica, la conservación y la preservación de la memoria se han convertido en este momento crucial de la historia en herramientas fundamentales de nuestra investigación humanística, científica para alcanzar la justicia y la comprensión profunda de aquello a lo que nos debemos como investigadoras e investigadores; no más en torres de marfil ajenos, ajenas a la realidad social.

En este sentido, instituciones, por ejemplo, como el Archivo General de la Nación que, a sus recién cumplidos 200 años, juega un papel fundamental para el desencarcelamiento de la memoria de México, tal como lo menciona su director, el doctor Carlos Enrique Ruiz Abreu, a quien le mandamos un abrazo y un saludo con profundo reconocimiento.

Además, cobra vital importancia el establecimiento de una agenda desde la oficina para la Memoria Histórica de México que fundó y coordinó de manera honorífica y ejemplar la historiadora, escritora, científica social, experta en diversas áreas de las humanidades, la doctora Beatriz Gutiérrez Müller, colega, parte del Sistema Nacional de Investigadoras e Investigadores, de nuestra comunidad académica. Esta iniciativa está formalmente incorporada al Archivo General de la Nación y es responsable de la creación y gestión actual de la plataforma “Memórica. México, haz memoria”, que traspasa una sencilla invitación al recuerdo, ya que funciona como un elemento habilitador del derecho que tiene el pueblo de México a la memoria de su pasado.

Y tenemos la honrosa tarea de participar, humildemente, desde el Conahcyt con H, porque ahora estamos encargados, encargadas de manera muy primordial de algo que nos mandata el gobierno de México que es el repositorio nacional, entonces hemos hecho mancuerna y es un trabajo muy importante, detrás del cual hay personalidades como Gabriela Pulido.

Los textos que reúne esta revista son un refrendo a la memoria que investigadoras e investigadores de diversas instituciones académicas narran y analizan sobre los procesos históricos desde el pensamiento crítico y las perspectivas complejas que cuestionan nociones como la de historia y la memoria conceptos que se problematizan en un primer artículo; por otro lado el devenir de actores como las poblaciones afromexicanas y mexicoamericanas, por ejemplo, se exponen las dificultades dentro de las disciplinas históricas para relatarlas, pues muchas personas especialistas eran justamente ajenas a su estudio, ejemplo de esto es la narración que este número incorpora acerca de las comunidades nahuas campesinas de Guerrero, que lucharon por su tierra y que fueron ignoradas y minimizadas por muchos años.

También se suman este diálogo las perspectivas que parten del análisis de la complejidad como son las diversas narrativas en torno a la figura de Emiliano Zapata, que aborda el doctor Felipe Ávila, coordinador de este número, y que dejan ver los intereses imperantes en su contexto lo cual nos invita a reflexionar y debatir historias más diversas con diferentes factores y aristas que confluyen en los procesos históricos.

Siguiendo esta línea, la doctora Ana Lau Jaiven se adentra en las distintas olas de los movimientos feministas y muestra sus puntos en común y también sus diferencias, pero a la vez resalta la fuerza con la que han empujado transformaciones profundas en la historia de nuestro país, en donde las mujeres siempre han sido son hoy día y serán fundamentales para la transformación hacia la justicia.

En ciencias y arte, que siempre tocamos esta intersección fundamental, el poeta recientemente laureado con el Premio Bellas Artes de Poesía Aguascalientes, Fabián Espejel, que, además, tenemos el honor de contar aquí con él, como un colaborador día a día, entrevistado por otro poeta, Leopoldo Laurido, aborda la relevancia de las sensaciones, las emociones y los sentidos en la memoria, así como el papel que esto tuvo en la reconstrucción poética de la primera expedición a la Antártica.

La relevancia y rescate de los saberes tradicionales relativos a temas como la cuenta de los días y sus lazos fuertes con otras actividades que para el ojo occidental pueden ser insospechados como lo es el telar, son los protagonistas de la sección Diálogos de Saberes y en ello el doctor Alejandro de Ávila Blomberg nos dará una cátedra fundamental.

Este número también se encuentra bien hilado con las ilustraciones que Santiago Moyao hilvana para exponer la riqueza de la historia, de la cual las y los mexicanos somos herederos; esta narrativa visual es fundamental porque comunica de una manera clara, sin dejar de ser profunda, a las juventudes y también a niñas y niños que han sentido una atracción especial hacia esta revista.

A su vez, en la portada, a cargo de Armando Fonseca, se protagoniza al nopal como pieza fundamental identitaria de la grandeza biocultural de nuestro país; un nopal que nace de la lava que nos sigue acompañando en este hermoso Valle de México fragmentado sí, por la urbanización que ha acompañado el desarrollo de esta gran urbe, pero todavía con presencia que en esta portada nos recuerda, es fundamental cuidar.

Con todos estos elementos, este número de la revista Ciencias y Humanidades busca hacer un instrumento colectivo que aproxime la memoria al pueblo de México y que sirva para la reconstrucción del pensamiento con aportes de la investigación crítica y el contraste.

Así pues, les invitamos a descargarla de forma gratuita y obtenerla físicamente en este Conahcyt y sin más, les dejo con las y los expertos para seguir profundizando en algunos de los aspectos que están en estas páginas de esta hermosa revista.

Muchas gracias y felicidades.