Especialistas reflexionan en webinario del Conacyt el papel de la mujer para alcanzar un sistema energético, justo y sustentable

El Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) llevó a cabo la 4ª sesión del webinario “Propuestas para un sistema energético justo y sustentable” donde abordaron, desde un enfoque multidisciplinario, sobre “Mujeres y energía: barreras y oportunidades para repensar el modelo energético”.  

En el encuentro, las especialistas profundizaron en preguntas sobre cómo se estudia y gestiona la energía desde una perspectiva de género, enfatizando en la importancia de la participación de las mujeres en el diseño de los sistemas energéticos, de modo que estos se encuentren basados en relaciones sociales igualitarias, y visibilizando las barreras de género que existen y que han sido en algunos casos superadas.

Para presentar el evento, la directora de Energías y Cambio Climático del Conacyt, Mtra. Alejandra Straffon, detalló que a lo largo de la historia el ámbito energético ha sido definido y gestionado por hombres: la energía se ha definido con el propósito de generar sistemas en beneficio de corporaciones y naciones. Por eso se busca integrar la perspectiva feminista en el ámbito energético como un vehículo para la consecución de derechos claves en la construcción de una sociedad más igualitaria, pero también visibilizar el rol de las mujeres en la generación de los cambios estructurales encaminados a promover una transición justa y sustentable.

Como primera ponente, la Mtra. Sandra Rátiva Gaona del Instituto de Ciencias Sociales y Humanas “Alfonso Vélez Pliego” de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (Buap) y parte de la Cooperativa Onergia, remarcó que en el sector energético mexicano hay una presencia predominante de varones, fenómeno que se replica en el resto del mundo. Añadió que hay menos mujeres en el ámbito laboral que impide que la toma de decisiones, espacios de poder y discusiones estratégicas en el sector, incorporen un enfoque de género.

Rátiva Gaona, remarcó que es importante generar información del uso diferencial de energía para establecer políticas públicas, como en el caso de la movilidad y el transporte, donde las mujeres y la población sujeta de cuidados, como niñas, niños y personas de la tercera edad, son los principales usuarios, a diferencia de los hombres que son los principales beneficiarios del uso del automóvil. Remarcó que el modelo patriarcal convierte la diferencia en fuente de desigualdad, “la cual repercute en la acumulación de energía en en la acumulación del trabajo del otro, por ello debemos buscar un marco simbólico que no valore lo masculino, sino que ponga la vida en el centro. Recuperar la capacidad cooperativa para erradicar la desigualdad y erradicar la acumulación”, dijo.

Por su parte, la Mtra. Elsa Bernal García, miembro de la Red de Mujeres en Energías Renovables y Eficiencia Energética (Redmeree), indicó que hay una subrepresentación de las mujeres en todos los ámbitos de la vida a pesar de ser el 52% de la población en México, algo que también impacta en el sector energético, lo que se refleja en las mujeres que estudian carreras relacionadas con la energía sustentable en educación superior y media superior, que corresponden al 30% de la matrícula, y al considerar las ingenierías relacionadas directamente con el sector energético disminuye al 21.4 %, lo que indica que, en las generaciones futuras que se integren al sector productivo, las mujeres tendrán una subrepresentación en el campo laboral, por lo que su participación en toma de decisiones se ve afectada.

En su participación, la Mtra. Dulce Magaña Cruz, integrante de la Cooperativa Túumben K’ooben, expuso el proyecto de este colectivo, el cual consiste en el Desarrollo de esquemas de microcréditos para que las mujeres tengan acceso a materiales, construcción y mantenimiento de alternativas a las estufas de leña, en regiones donde es necesario trabajar en el respeto de las prácticas, usos y costumbres de los pueblos originarios. “Son mujeres dando créditos a otras mujeres, casos exitosos en donde las experiencias de las mujeres pueden compartirse con otras a partir de un quehacer cotidiano”.

Finalmente, la Mtra. Sissy Larrea, integrante de Gender Included S.A.S., comentó que el 75% de las mujeres perciben que existen barreras para incursionar en el sector energético, esto tiene que ver con el “techo de cristal y el piso pegajoso”; “las mujeres seguimos asumiendo la mayoría de las tareas de cuidado, de las actividades domésticas, de los trabajos de cuidado”, lo cual impide que puedan entrar en un sector que requiere de un mayor esfuerzo para competir. 

Indicó que el análisis de lo que se puede hacer desde las secretarías de ciencia, tecnología, información, comunicación y formación, es de amplia importancia para conocer las causas que permitan superar las barreras que están enfrentando las mujeres que no entran a laborar a este sector y cómo se puede dar seguimiento a los cambios que se implementan, para evaluar si funcionan o no.

El webinario fue moderado por la Dra. Sofía Ávila Calero, parte del Programa Nacional Estratégico de Energía y Cambio Climático del Conacyt y por la Dra. Marcela Torres Wong de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), México.

Para visualizar la sesión completa, puedes acceder mediante la siguiente liga: https://bit.ly/3CgaTXQ.