- Se lleva a cabo del 11 al 13 de octubre en sesiones híbridas
- 77% de cuerpos y corrientes del país sufren algún grado de contaminación y uno de cada cinco acuíferos padece sobreextracción: titular del Conacyt, María Elena Álvarez-Buylla Roces
- Ponentes nacionales e internacionales profundizarán sobre causas de las crisis hídricas y cómo deben abordarse para aportar soluciones rápidas y justas
- Ponentes nacionales e internacionales profundizarán sobre causas de las crisis hídricas y cómo deben abordarse para aportar soluciones rápidas y justas
Autor
Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología
Fecha de publicación
11 de octubre de 2022
Categoría
Comunicado
Para abordar los principales componentes de una solución compartida y efectiva a los problemas del agua en México, el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), a través del Programa Nacional Estratégico de Agua (Pronaces Agua) y el Centro de Investigación en Materiales Avanzados (Cimav), llevan a cabo el Congreso “Agua para el bien común: incidencia, investigación y retos”, que reúne a representantes de la comunidad académica, científica y de organizaciones de base social en un diálogo de reflexiones críticas sobre las crisis hídricas que enfrenta el país y las soluciones orientadas al bien común.
Durante la inauguración del congreso, que tiene como sede presencial las instalaciones del Cimav, en Chihuahua, la directora general del Conacyt, María Elena Álvarez-Buylla Roces, señaló que México enfrenta una crisis del agua de carácter complejo, la cual requiere voluntad y formación para integrar un frente común que permita diseñar e implementar soluciones a problemas concretos que, por su gravedad —como es el sistema metabólico hídrico en el país— requieren atención decidida y una solución integral, profunda, amplia y rigurosa.
Para tener idea de lo que las políticas neoliberales causaron a este país, dijo, el 77 por ciento de los cuerpos y corrientes del país sufren algún grado de contaminación, y uno de cada cinco acuíferos padece sobreextracción, contaminación, alteración de los flujos de agua subterránea o intrusión salina. Además, numerosas cuencas y regiones del territorio, especialmente en el norte y centro de la República mexicana, son cada vez más vulnerables a eventos climáticos extremos, como sequías e inundaciones.
Álvarez-Buylla Roces destacó que, el sistema laxo, permisivo y de explotación que enquistó el régimen pasado, revela en la actualidad un diagnóstico que demanda una intervención inmediata y contundente para recomponer los abusos y el acaparamiento de este recurso vital, ya que sólo 10 por ciento de los usuarios industriales del líquido acapara 78.5 por ciento del volumen de agua concesionada para el uso con este fin; en la agricultura, 10 por ciento de los usuarios agrícolas y agroindustriales concentran, aproximadamente, 45 por ciento del volumen de agua concesionada a este rubro:
“Los desafíos son muchos y profundos, porque la mayoría de ellos se anclaron en la omisión, la corrupción, característica del régimen neoliberal. Hoy tenemos la posibilidad de abordar el reconocimiento legal de los sistemas comunitarios de agua, que han sobrevivido en condiciones de vulnerabilidad e inequidad como sujetos de derecho, y en un contexto donde se desconocen sus prácticas en el manejo de cuencas, que son congruentes y compatibles con la conceptualización del ciclo socio-natural del agua en sus territorios.”
Ponderó que el renovado Conacyt apuesta por una fórmula transformadora anclada en los Pronaces, la cual se funda en la investigación e incidencia para comprender, entender y hallar alternativas a los retos prioritarios del país, transformando los modelos de investigación académica y basando su operación en la convocatoria a múltiples sectores de la sociedad mexicana.
Por su parte, la comisionada de la Sección Mexicana de la Comisión Internacional de Límites y Aguas entre México y Estados Unidos (CILA MEX-EUA), Adriana Beatriz Carolina Reséndez Maldonado, consideró que México enfrenta tres grandes retos en la frontera: la sequía en la cuenca del río Colorado, la sequía en la cuenca del río Bravo y el problema del saneamiento fronterizo:
“Por primera vez en la historia tenemos estos tres grandes retos en el mismo periodo. La cuenca del río Colorado está experimentando una sequía histórica de más de 23 años, la peor de los 144 años de los que se tiene registro”.
Expuso que a ello se añade la gravedad de un fenómeno denominado aridificación, causado por el cambio climático en los últimos años, el cual ha generado que los escurrimientos de la capa de nieve que llegan al río Colorado apenas alcancen 30 por ciento de los niveles históricos registrados. En la cuenca del río Bravo se ha experimentado, desde la década de los 90, una disminución en los escurrimientos de los afluentes de los que se alimenta, motivado por diferentes causas, incluyendo la sequía:
“De octubre de 2020 a julio de 2022, teníamos los menores registros de escurrimientos al río Bravo de los afluentes de los que tenemos registro desde 1954, que es cuando inició la contabilidad de las aguas a las entregas a Estados Unidos. Estábamos muy por debajo de un escenario extremadamente seco”.
Carolina Reséndez expuso que todo ello, así como el déficit en la infraestructura fronteriza para el saneamiento, que se encuentra obsoleta y sin mantenimiento adecuado, ha ocasionado derrames transfronterizos que causan problemas internacionales de salud pública.
Por ello, la CILA MEX-EUA hizo un plan de saneamiento a nivel de gran visión que integra un diagnóstico y programa con posibles soluciones para la frontera, que comprende el saneamiento en Tijuana y San Diego con inversión de más de 480 millones de dólares.
La directora general del Cimav, Leticia Myriam Torres Guerra, celebró la realización del Congreso “Agua para el bien común”, que se enmarca en el 28 aniversario de este Centro Público de Investigación coordinado por el Conacyt, así como la pertinencia de abordar medidas urgentes y justas en los espacios donde este centro también tiene sedes y que, además, han sido gravemente afectados por la disponibilidad de agua, como Chihuahua, Durango y Monterrey.
El secretario del Comité Ejecutivo del Pronaces Agua, Octavio Rosas Landa, explicó que este congreso es una extensión en la profundización conceptual que inició en un diálogo crítico entre personas investigadoras, académicas y de la sociedad civil durante un foro en 2020, cuyo trabajo refleja la preocupación por encontrar salidas a las crisis del agua en un contexto marcado por la intensificación del cambio climático, la polarización política y la incertidumbre económica.
“En este congreso buscamos hacer más intenso el diálogo para articular esfuerzos de investigación e incidencia de comunicación y de generación de información relevante, pertinente y accesible, para orientarlos a una solución compartida y efectiva de los problemas nacionales del agua; es decir, hacia el bien común”.
El Congreso “Agua para el bien común: incidencia, investigación y retos” se propone responder dos preguntas esenciales: por qué los problemas del agua se han acumulado más rápidamente que las soluciones, hasta el punto de llegar a una crisis que parece no tener salida; y cómo deben abordarse los problemas nacionales del agua para aportar una mejor solución, más rápida y justa. En el acto inaugural, también parrticipó el titular de la Unidad de Articulación Sectorial y Regional del Conacyt, José Alejandro Díaz Méndez.
Desde distintas perspectivas, las y los conferencistas magistrales, ponentes y moderadores participarán en distintas mesas bajo una modalidad híbrida. Las mesas de trabajo pueden seguirse en https://bit.ly/3rNdmTF y en las redes sociales del Conacyt.
El programa completo puede consultarse en: https://bit.ly/3em3MUJ.
Comunicado 327/2022
Coordinación de Comunicación
comunicacion@conacyt.mx
conacyt.mx